Deniz polisinden Adalar çevresinde 'deniz taksi' denetimi

El Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) anunció el domingo por la noche que todo el centro de la ciudad había sido declarado “zona de reunión ilegal”. Esto amplía significativamente la orden emitida más temprano frente al Centro de Detención Metropolitana.

El jefe de la LAPD, Jim McDonnell, declaró en una conferencia de prensa nocturna que diez manifestantes fueron arrestados durante los enfrentamientos con la policía en el centro. CNN constató que la policía usó gas lacrimógeno y granadas aturdidoras para dispersar a la multitud, y que algunos agentes golpearon y empujaron a protestantes durante los arrestos.

Según la oficina del gobernador Gavin Newsom, aproximadamente 300 miembros de la Guardia Nacional de California están desplegados en Los Ángeles. Newsom solicitó oficialmente a la administración Trump que anulara el despliegue “ilegal” y permitiera a las autoridades locales restablecer el orden.

El Mando del Norte de EE. UU. anunció el domingo por la noche que unos 500 marines en servicio activo estaban en “estado de alerta para ser desplegados” y serían enviados desde el centro de combate en Twentynine Palms, California, si continuaban los disturbios. El Secretario de Defensa Pete Hegseth advirtió el sábado que los marines se estaban preparando para el despliegue.

Durante el día se registraron interrupciones de tráfico, incluyendo en la carretera US‑101, que conecta Los Ángeles con otras ciudades de California como San Francisco. La 101 fue cerrada por completo durante aproximadamente 90 minutos después de que cientos de manifestantes ingresaran a la vía. Fue reabierta después, pero luego los carriles hacia el sur se cerraron nuevamente hasta nuevo aviso tras lanzar objetos contra vehículos policiales.

Espaniol News Agency Espaniol News Agency

 

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